Cancún, Q. Roo.- La violencia se apoderó del Cereso de esta ciudad este jueves, cuando grupos rivales se enfrentaron en una riña colectiva ante el temor de los visitantes, lo que dejó varios heridos por armas punzo-cortantes y el desalojo de familiares y empleados de los juzgados.
Fue las 13:45 horas aproximadamente, cuando se activó el Código Rojo en el interior del penal, presuntamente por la presencia de un reo y que su nombre ha sido mencionado en tres narcomantas que han dejado colgadas en la ciudad, que además le ha costado la vida por lo menos a un celador.
Por su parte, según el Secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Alberto Capella Ibarra, después de un poco más de una hora quedó controlada la riña, que dejó como saldo al menos ocho reclusos lesionados; sin embargo, se dijo que al menos tres de ellos estarían gravemente lesionados, por lo que fueron internados en diferentes hospitales.
En tanto, desde que se activó la alerta, elementos de las diversas corporaciones sitiaron en penal ubicado en la Región 99, donde fuerzas federales, militares y marinos apoyaron en el exterior para evitar fugas de reos.
Mientras familiares esperaron en las inmediaciones que les dieran informes sobre sus parientes internos en el penal.
Por su parte, la Secretaría de Seguridad Pública de Quintana Roo al mando de Alberto Capella, confirmó mediante un comunicado que fueron 13 lesionados, uno de ellos de gravedad y que permanece internado en el Hospital General junto a otros cuatro reclusos.
Siendo aproximadamente las 13:55 horas, inició un enfrentamiento entre personas privadas de la libertad del dormitorio S y las del dormitorio E, agrediéndose con todo tipo de objetos contundentes y punzocortantes, lo que obligó a la autoridad de Seguridad Pública a intervenir bajo los protocolos y procedimientos sistemáticos de operación instaurados para el control de disturbios permitiendo lograr recuperar el orden y la disciplina del Centro Penitenciario de Cancún, resultando un total de 14 personas privadas de la libertad lesionadas, de las cuales cinco fueron canalizadas al Hospital General de Benito Juárez (una de ellas en estado grave), a efecto de que recibieran atención de primer nivel mientras los restantes fueron atendidos en el servicio médico del Cereso y posteriormente ubicados en el área de conductas especiales hasta en tanto el Comité Técnico determine lo conducente», se informa oficialmente por las autoridades.
Asegura la dependencia que «se considera que lo anterior obedece a la reclasificación penitenciaria que esta administración está buscando alcanzar acorde a los lineamientos de la Ley Nacional de Ejecución Penal en los diversos centros penitenciarios del estado, a partir del abatimiento del autogobierno que imperaba, tomándose decisiones de alto riesgo institucional para lograr el control en definitiva de la población penitenciaria, como lo es el reciente traslado de las 163 personas privadas de la libertad al Cereso de Chetumal, lo cual genera la neutralización y debilitación de los grupos criminógenos que cohabitan dentro del Cereso de Cancún; sin embargo, al carecer de una infraestructura que permita la contención de internos de alto índice de criminalidad, baja adaptabilidad social y alto índice de estado peligroso que requieran medidas de seguridad o vigilancia especial, y al querer recuperar el poderío por años poseído se enfrascaron en una riña campal».
«La autoridad penitenciaria confirma su determinación para avanzar cada día en el mejoramiento de las condiciones de reinserción social de los internos del estado, en su integridad personal, una estancia digna en reclusión, elevar la atención a internos con requerimientos específicos y el fortalecimiento de las condiciones de gobernabilidad bajo la base de los derechos humanos, la educación, el trabajo, la capacitación para el trabajo, la salud y el deporte contemplados en el artículo 18 de nuestra carta magna», finaliza el comunicado.