Cancún, Q. Roo.- Un piropo a la esposa de un reo en este domingo de visitas en el Cereso de Cancún, provocó una batalla campal, dejando tres lesionados, confirmó el responsable del penal, Jorge Adrián López Valenzuela.
Explicó el Alcaide del Cereso que la “falta de respeto” no fue tolerada por uno de los reos, y al reclamarte al “galán” se fueron a los golpes.
De ahí, amigos de ambos se temieron y la gresca creció a una batalla campal donde al menos unos 40 internos se vieron involucrados.
Ante el temor de un motín, las autoridades carcelarias solicitaron el apoyo de los cuerpos policiacos y del Ejército.
En minutos, el grupo antimotines ingreso al penal donde ya se había retirado a las visitas y se había desalojado a quienes estaban en la zona conyugal.
En tanto, a los reclusos se les confinó nuevamente a sus aéreas para controlar la riña y aplacar a los revoltosos.
Afuera del Cereso, media centena de familiares exigían saber el estado de salud de los reclusos, por lo que una vez pasado el peligro, el Alcaide Jorge López Valenzuela entabló un diálogo con ellos y con los medios de comunicación.
A los familiares les dijo que visitó personalmente cada área Almoloya, para verificar que no hubieran lesionados; del mismo modo les explicó a las mujeres de los reclusos que por protocolo, se suspendía la visita conyugal de este domingo y que sería hasta mañana que ellas podrían pasar su rato de amor con sus maridos presos.
Ante los medios, López Valenzuela dio a conocer que únicamente había tres lesionados, ya que en la riña volaron pedradas entre los grupos antagónicos.
Dijo que uno recibió una pedrada en la cabeza, otro se rompió la nariz por un rocazo y el tercero, se dislocó el tobillo al intentar correr del lugar.
20 minutos después, la Secretaría Estatal de Seguridad Pública confirmó que la riña se había controlado y que todo estaba en calma en el interior del penal.