Chetumal, Q. Roo.- El secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, expresó que el gobierno federal está al tanto de los hechos que se han originado en las embarcaciones de Barcos del Caribe en Playa del Carmen y Cozumel, en donde fue hallado el día de ayer un artefacto. Además dijo, hay colaboración con autoridades americanas para que sepan que las personas de otros países que ingresen a territorio nacional y elijan como destino Quintana Roo, tienen niveles de seguridad adecuados.
El titular de Segob señaló que la Procuraduría General de la República (PGR) tiene hipótesis sobre lo que ocurre, pero será la propia instancia la que dé a conocer los resultados y los responsables que serán puestos a disposición de las autoridades.
Está acotado el problema en este momento, está identificado, el último aparato no ponía en riesgo a la población, era una nave varada y desde luego se tomaron las medidas”, aseguró.
En relación a la versión del autoatentado por parte de los propietarios de la naviera, Navarrete Prida dijo que no puede descartarlo y reiteró que el riesgo a la población y que se mantiene en curso la investigación.
En tanto admitió que ha habido un efecto colateral al estado por la emisión de una alerta turística, pero que los asuntos de justicia no pasa por la esfera de lo político aunque haya un político involucrado, sino que pasa por el esclarecimiento de pruebas.
El titular de la Segob aclaró que de este último hecho, no se encontró en una embarcación que fuera abierta al público –como ya antes lo había aclarado el gobierno de Quintana Roo–, sino que se hallaba varada mucho tiempo atrás.
Afortunadamente no ponía en peligro vidas humanas», manifestó.
En ese orden, expresó su reconocimiento al gobernador Carlos Joaquín, quien dijo, ha estado atento y mantenido gran comunicación con el gobierno federal.
Añadió que se tomó como decisión, una vez que se trata de una empresa particular, de suspender el servicio de la naviera en tanto se esclarecen los hechos presumiblemente delictivos, reduciendo el riesgo a la población de manera drástica.
El gobernador Carlos Joaquín por su parte, insistió en que habrá que esperar el dictamen de la autoridad para conocer las causas.
Fuente: La Jornada Maya