Cancún, Q. Roo.- Asesinos habrían decapitado a un trabajador de la construcción para dejar su narcomanta frente al 64o. Batallón de Infantería la mañana de este viernes, donde acusaban a El Pantera, al expolicía Ramón Chacón Mantilla y al alcaide de la cárcel de Cancún, de ser quienes encabecen la ola de ejecuciones en Benito Juárez y Playa del Carmen, sobre todo las extorsiones a empresarios.
Fue en las primeras horas de este viernes cuando se dio a conocer la apareció una narcomanta colgada entre los árboles en el área verde frente al batallón, en la avenida José López Portillo, a la altura de la calle Laguna Verde.
Sin embargo, cuando los policías llegaron para resguardar la zona, hallaron junto a la manta una cabeza humana, por lo que se dio parte a las diferentes corporaciones, implementando los militares un retén en las inmediaciones.
Minutos después los vecinos dieron a conocer el texto de la manta. “Atención autoridades de Quintanaroo se les hace este llamado para que se aga pública de los verdaderos generadores de la violencia en el estado un claro ejemplo fue la ejecución del empresario gonzalo poot kantun en la taqueria el fogonazo en playa del carmen esto como resultado por no pagar una extorsión a victor herrera silva alias el pantero quién controla la plaza en playa del carmen y en cancun en cordinación de chaco mantilla detenido reciente quien controla desde la carcel en una asociacion con cristina vasques gallegos, hernesto herrera silva garnica cabecilla de la nueva generación. Estos son los responsables de la ola de violencia que se a desatado en el Estado a estos los apoyó el director de la carcel de cancun miguel angel matamoros (sic)”, se leía en el mensaje, al parecer en un intento para que los militares intervinieran en la prisión de Cancún y Playa del Carmen.
Después de ser retirada la manta y la cabeza humana enviada a las instalaciones del Semefo, se dio a conocer que el resto del cuerpo fue hallado en el fraccionamiento Izamal de Cancún, ubicado entre las regiones 317 y 320, en un terreno que está siendo trabajado con maquinaria pesada para su construcción.
Ahí, los policías hallaron junto a una gran roca de laja, el cuerpo humano sin cabeza, y que al parecer le habían colocado un narcomensaje.
Hasta la tarde de ese viernes, la identidad del decapitado permanecía en el anonimato; sin embargo, se dijo que podría tratarse de un simple empleado de la construcción, por las botas negras de uso rudo que calzaba. El sujeto vestía una playera gris, ropa interior de licra azul y un pantalón de cargo (con bolsas en los costados de las piernas) azul marino.
Después del medio día, el cuerpo también se hallaba en el Semefo, en espera de que algún familiar lo pueda identificar.