Durante una consulta en la clínica, un propietario de un perrito, preguntó lo que era la solitaria del perro y si éste parásito es el mismo que afecta a las personas, debido a que a su pequeña hija le habían diagnosticado una solitaria La ciencia sencilla va a explicar.
Se le conoce como solitarias a los parásitos planos. En parasitología clasificamos a los parásito por su origen biológico como unicelulares (protozoarios -las amibas por ejemplo-), parásitos más complejos como los parásitos redondos o nemátodos (conocidos como lombrices) y parásitos planos o céstodos, las solitarias y éstas desarrollan una larva que llamamos cisticerco, además son hermafroditas, es decir, tienen los órganos masculinos y femeninos para su reproducción, por lo que se encuentran un solo ejemplar siempre, de ahí su nombre de solitarias.
La solitaria de los perros la denominamos Dipylidium caninum y se encuentra en el intestino delgado del perro. El parásito produce segmentos que contienen los huevecillos, al romperse, los huevecillos son ingeridos por una larva de pulga que al ser adulta, los huevecillos se transforman en cisticercoides en su interior. La pulga, al ser ingerida por el perro al momento de rascarse con la boca cuando ésta le pica, la pulga se desintegra en el estómago del perro, liberando el cisticercoide que al llegar al intestino delgado se fija y empieza la formación de la solitaria, iniciándose con eso, el ciclo de vida de este parásito.
El riesgo de que las personas puedan infectarse con este parásito es real.
Las solitarias mas comunes en los seres humanos son dos, la Taenia solium y la Taenia saguinata, cuyas larvas son precisamente los cisticercos. El huésped definitivo es el ser humano de estás dos solitarias, y las larvas se encuentran en el cerdo (para la Taenia solium) y en las reses (para la Taenia saginata).
El parasito tiene una forma listón de uno o dos milímetros de grosor, que mide de tres a ocho metros de longitud. Su cabeza, llamada escólex, posee una corona de ganchos y ventosas para adherirse al intestino delgado de su huésped.
Si una persona tiene el parásito en su intestino, en su excremento saldrán segmentos de la tenia que contienen huevecillos que al ser ingeridos por el puerco o la res según sea el caso, pueden penetrar los diferentes tejidos del sistema digestivo e ir a la circulación de la sangre y quedarse en los músculos, el cerebro o en diferentes órganos del animal. si las personas ingieren carne mal cocida y con cisticercos, al llegar al intestino delgado se desarrolla la solitaria. La importancia para el ser humano es que las personas pueden también ingerir segmentos del parásito y los cirsticercos se quedan en los músculos o el cerebro, en dónde ésta afección puede causar alteraciones nerviosas de gravedad. Por esto estas teniasis se consideran un problema serio de salud pública.
Si bien los dos tipos de teniasis se encuentran a nivel mundial, factores sociales, económicos y culturales hacen que su presentación sea diferente. La Taenia solium es más frecuente en países subdesarrollados, debdo a la mala higiene del medio ambiente y personal. Además de las precarias condiciones en las que viven los puercos que se usan para producir carne y sus derivados, así como a la mala inspección de las carnes en los diferentes rastros. Un problema de salud publica es sobre todo la infección por cisticercos de Taenia solium, es decir el cisticercus celluosae, que producen una enfermedad muy grave. Como la tenia, la cisticercosis es más común en países en vías de desarrollo. La neurocisticercosis y la cisticercosis ocular o periocular ha sido observada en países de América Latina y la frecuencia de la neurocisticercosis es particularmente alta en México; se considera que el 3% de la población sufre este tipo de afección con o sin manifestaciones clínicas. La neurocisticercosis, se caracteriza por agudas cefaleas (dolores de cabeza intensos), vómitos, alteraciones visuales y de memoria, convulsiones, trastornos de la conducta, insomnio incluso ataques epilépticos, todo depende del número de cisticercos y su localización en el cerebro, lo que provoca que muchas veces los infectados desconocen que la padecen, pues atribuyen los síntomas a otras causas que van desde inexplicables migrañas hasta achaques de vejez.
La recomendación médica, tanto para los humanos como para los perros, es la desparasitación periódica o consumir carne bien cocida. Lavar y desinfectar legumbres pues se utiliza el riego con aguas contaminadas y no tratadas. No dar carne cruda a los perros si se alimentan de comida casera y debido a que se les da comida industrial, esta parasitosis es de baja frecuencia, la mayoría se contamina al oler heces de otros perros infectados en las calles.
La Organización Mundial de la Salud registró 50 mil muertes por neurocisticercosis. No se debe olvidar que dadas las condiciones en que se preparan los alimentos de venta al público, es muy probable que muchos de los pacientes adquieran la cisticercosis a través de este medio. Normalmente para tratar la solitaria, se dan medicinas como el praziquantel y el albendazol, ambos efectivos contra el parásito en el intestino delgado. Estas fórmulas también pueden actuar contra los cisticercos que se encuentran en el cerebro y aunque son efectivas en su destrucción, quedan secuelas (alteraciones después de un tratamiento) como dificultad para caminar, hablar o problemas mentales, algunas veces se utiliza la cirugía general para atrapar los cisticercos y extirparlos, pero algunas veces estos parásitos se encuentran en lugares en donde es difícil el acceso con las técnicas quirúrgicas normales. Ahora con el desarrollo y el avance de la cirugía cerebral de mínima invasión y la mezcla con métodos computarizados de diagnóstico, es posible extirpar los cisticercos en cualquier parte del cerebro. El procedimiento de la operación es incluso, sencillo: a través de una tomografía se confirma el diagnóstico de cisticercosis, después el neurocirujano identifica la posición exacta del o los parásitos, hace un mapa para entrar el cerebro sin dañar núcleos cerebrales, se realiza un pequeño orificio y se introduce un endoscopio de apenas 6 milímetros de diámetro!!!… que además tiene tres canales, uno que drena y mantiene la presión estable del líquido cerebral (lo que se le conoce como cefalorraquídeo), otro que se aloja a la cámara y luz, y un tercero para el instrumental que consiste en una pequeña tijera de apenas un milímetro, un catéter que extrae el cisticerco y un electrodo que cauteriza…el endoscopio es guiado hasta el área donde está alojado el parásito, se succiona, se verifica que todo este limpio y listo. Este procedimiento permite al paciente recuperarse en máximo 3 días.
Como han leído, este tipo de intervenciones quirúrgicas tienen una gran ventaja, pero el problema de la cisticercosis no radica en el método de control, ya sea quirúrgicos o farmacológicos, sino en programas educativos para la salud para ayudar a la población a prevenir con medidas necesarias básicas de limpieza para erradicar el problema.
Dr. Guevara. Isla Mujeres,