HOLBOX, MX. – Aun cuando el presidente de Lázaro Cárdenas, Nivardo Mena Villanueva ha intentado minimizar los hechos violentos que sucedieron en la Isla de Holbox hace unos días, lo cierto es que el tráfico de drogas es un problema que se está saliendo de control y más cuando los criminales saben que sólo hay tres policías para toda la ínsula.
Los más preocupados son los que sí viven allí y no como el alcalde quien en su residencia en la Campestre de la ciudad de Mérida sigue trazando planes para su próxima campaña política.
Fue el pasado 14 de septiembre, en el marco del segundo informe de Gobierno del flamante alcalde cuando las alertas se activaron en Holbox, un hombre había sido encontrado muerto (degollado).
Aunque la versión que existe hasta el momento aseguran que el occiso de esa noche se dedicaba a la distribución de drogas en la Isla, es claro que otros grupos ya empiezan a reclamar el territorio, esto ante la apatía de la misma autoridad.
Quienes viven allí aseguran que la autoridad ha puesto “oídos sordos” al problema y ha preferido mejor irse a vivir a Mérida junto con su esposa y sus hijos.
Como ha sucedido en varias partes del Estado, ahora parece ser el turno de Holbox en donde parece existir ya una pelea por el control de la venta de drogas, pues a menos de 24 horas de este hecho, otro hombre fue baleado en la pierna.
El presidente municipal de Lázaro Cárdenas, aquel quien a nivel nacional dijo que la cura por el coronavirus ya se tenía desde hace tres meses, ha tratado de minimizar el problema calificando el hecho como “casos aislados”.
Sin embargo, para quienes si viven en la Isla de Holbox, el problema es más grave de lo que parece y todo es a raíz de la falta de atención por parte de las autoridades, empezando por el alcalde y desde luego por parte de la Fiscalía General del Estado (FGE).
El crimen del pasado 14 de septiembre se registró cerca de la medianoche, en la zona conocida como “San Manueles” en Holbox, en donde un sujeto conocido como “Mike” o “Maikol”, murió por una herida ocasionada por un arma blanca en el cuello.
Cuando el sujeto fue encontrado, los habitantes trataron de solicitar auxilio, pero nada se pudo hacer para salvarlo, murió en el mismo lugar.
Para los habitantes, este hecho fue un simple ajuste de cuentas, ya que el occiso era conocido como narcomenudista en Holbox.
Los holboxeños temen que esto solo sea el inicio de una oleada de crímenes, como ha venido sucediendo en Cancún o en Isla Mujeres y más cuando saben que no existen policías suficientes para poder hacer frente al problema.
Dicen que el problema de las drogas como en muchos otros destinos de Quintana Roo es un tema delicado, pero en Holbox, se ha visto que la venta se da inclusive a plena luz del día.
Esperan que el Gobernador ponga atención al problema antes de que estos crímenes cobren la vida de algún inocente como sucedió hace unos meses en Isla Mujeres.