El Obispo de la Prelatura Cancún-Chetumal, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, lamentó que el proyecto de Malecón Tajamar, entre estos la Basílica «Santa María del Mar» continúe secuestrado por un grupo de ambientalistas radicales que no permiten el desarrollo de esta zona.
Señaló que la afectación no ha sido sólo para los empresarios que invirtieron en este proyecto, sino que también el que se mantenga frenado ha impedido la generación de miles de empleos, los cuales representarían la mejora en la calidad de vida de muchas familias.
El representante de la Iglesia católica en Quintana Roo, destacó que ellos están agotando hasta la última instancia para recuperar y continuar con el proyecto original de la Basílica, sin embargo también reconoció que de no ser este posible, trabajan en un plan «B», el cual iría más de acuerdo con el nuevo concepto que se ha escuchado se podría emplear en este lugar, de tal manera que sea un proyecto ecológico en donde los ambientalistas puedan participar en su construcción, a fin de que el tema de medio ambiente no este peleado con el desarrollo.
«Considero que se puede llegara un diálogo, un acurdo en donde los ambientalistas podrían aportar una visisón, una imagen atractiva turiscamente que no este peleado con el medio ambiente y la naturaleza, ya es hora de que las cosas cambien», expresó
En cuanto a este tema, precisó que ha habido ya un acermaineto con Fonatur, en donde se habla de una posible reubicación en los alrededores, cuya propuesta dijo no le ha parecido mal, pues el proyecto se puede reajustar, elaborar uno nuevo, «o sea una iglesia verde», que sea más atractivo, provechoso y útil, que fuera de esparcimiento familiar y recreativo, dijo el obispo prelado.