Este lunes inició en un lujoso hotel de Cancún el mercado de piernas más importante del futbol mexicano, donde equipos venden o cambian a jugadores de cara al torneo Apertura 2017, cerrando toda negociación el próximo 8.
Como cada año, los 18 dueños de los equipos de la Liga MX se reúnen para vender o cederse futbolistas, según las condiciones de los directores técnicos; además, jugadores rezagados buscan comprador en el llamado Draft.
Este año, los dirigentes no habían anticipado ningún intercambio ni fichajes, pero dieron a conocer el listado de jugadores que están dispuestos a ceder.
Como el caso del extranjero Luis Reyes, quien es buscando por el subcampeón Tigres, además del América y Monterrey. Por su parte, Tigres de Ricardo Ferretti buscará hacerse Luis Reyes, quien también es buscado por América y Monterrey.
En tanto, Ismael Sosa y Eduardo Vargas, son pretendidos por Cruz Azul; mientras Jürgen Damm, podría emigrar a Europa, si Guadalajara de Jorge Vergara, no le llega al precio.
¿En qué consiste?
Es un mercado de jugadores. Los equipos ofrecen a otros clubes los futbolistas que ya no les interesan, ya sea para venderlos, prestarlos o intercambiarlos (sí, como mercancía). Todo para armar un mejor conjunto de cara al certamen venidero. Eso sí, sólo se pueden negociar jugadores nacionales o extranjeros que militen en otra escuadra de la Liga MX.
¿Los jugadores pueden definir su destino?
Son pocos los casos en los que los futbolistas tienen voz y voto en su futuro. Si su club llega a un acuerdo con otro, poco importa para los directivos la opinión del jugador, quien muchas veces es el último en enterarse de su traspaso.