Cancún, Q. Roo.- Violento inicio de este sábado con el fallido asesinato a balazos de un custodio del Cereso de Cancún y la ejecución de un hombre en otro punto de la ciudad, lo que puso nervioso a los muchachos de Alberto Capella, quienes arrestaron momentáneamente a un reportero de Novedades.
Fue en los primeros minutos de este sábado, cuando policías comisionados como escoltas de un funcionario activaron el Código Rojo, ya que al circular en una Suburban blanca por la avenida Nichupté, a la altura de la Región 521, frente a la Región 99, se percataron que dos sujetos en motocicleta disparan contra un hombre a las afueras de un Oxxo, repeliendo la agresión a balazos.
En minutos, elementos de las policías Estatal, Municipal y Ministerial llegaron al lugar, ya que la víctima del atentado era un custodio que recién había salido de su turno de trabajo en el penal de esta ciudad.
Según la información preliminar, el custodio al ver que le iban a disparar, logró ocultarse en el Oxxo ubicado entre los fraccionamientos Villas Cancún y Villas Quintana Roo, y para su gran fortuna, en esos minutos pasaban los custodios, quienes ahuyentaron a los sicarios a balazos, quedando todo en un intento de ejecución.
Hay que recordar que esta misma semana, un guardia privado fue ejecutado a unos pasos del Cereso en la Región 99, a quien presuntamente los sicarios confundieron con un celador del penal; y es que los elementos comisionados como celadores del penal han sido amenazados de muerte en mantas colgadas cerca del lugar, pero que han sido ocultadas por las autoridades.
Ejecutado mañanero
Más tarde, a las 9 de la mañana, se activó nuevamente el Código Rojo al ser reportado al número de emergencia 911, que sicarios desde una motocicleta, dispararon y ejecutaron de varios balazos a un hombre en la Región 101, manzana 90.
El cuerpo del hombre identificado como “El Cuñado”, quedó tirado a media calle en la esquina de la calle 36 con 133, a una cuadra de la avenida Miguel Hidalgo (Ruta 5), donde vecinos intentaron darle los primeros auxilios, pero al llegar los paramédicos, el baleado ya había perdido la vida.
Hay que destacar que debido a que reporteros de la fuente policiaca seguían en el primer atentado en la Región 521, al saber del segundo ataque, acudieron a éste y llegaron antes que los policías estatales, pero los uniformados se tornaron violentos y esposaron al reportero Erik Galindo, quien estaba realizando su trabajo.
Según los policías, el comunicólogo estaba dentro del acordonamiento; sin embargo, la cinta amarilla fue colocada hasta que llegaron los policías, obviamente después de los reporteros. Ante la presión de los compañeros reporteros de otros medios y de testigos del prepotente acto, a los nerviosos policías no les quedó más que liberar a Erik Galindo, ya que se identificó plenamente y no violó los “protocolos” de Seguridad Pública.
Finalmente, el cuerpo del ejecutado número 163 fue levantado por peritos de la Fiscalía General del Estado, para trasladarlo al Semefo. En el lugar, trascendió, se aseguraron siete casquillos percutidos calibre 9 milímetros.
De los sicarios en ambos ataques no hay pistas, pero se espera que el jefazo de la Secretaría Estatal de Seguridad Pública, Alberto Capella despierte y regrese de Morelos donde pasó la noche y dé a conocer los videos grabados por las cámaras de seguridad que tanto presume, operan en la cuidad.
Y es que según la cuenta de Facebook Club Wikileaks, Alberto Capella estuvo de visita por el estado de Morelos la noche del viernes conviviendo, hasta donde llegó rodeado por guaruras y en helicóptero, ignorando las medidas de austeridad que ha solicitado el gobierno federal.
CARTA CIUDADANA
Capella fuera de Morelos.
Alberto Capella hiciste mucho daños a Morelos como seguramente lo estás haciendo en Quintana Roo, hoy tienes el cinismo de venir a un concierto a Jojutla, lleno de escoltas y hasta con un helicóptero privado, no se le desea el mal a ninguna persona, pero en este caso haremos una excepción y te deseamos que pagues todo el daño que nos hiciste, TU NO ERES UNA PERSONA ERES UN DEMONIO”, se lee en el mensaje que escribieron en Facebook, junto a una fotografía donde se aprecia a Capella Ibarra.
