En protesta al incumplimiento en el pago de estímulos COVID-19 y falta de condiciones para la protección de su salud, personal del Hospital General de Chetumal inició paro parcial de labores.
Los servicios no están interrumpidos pues le desarrolla personal de suplencias.
Los inconformes se asesoran juridicamente para realizar paro total, en caso de ser necesario.
También para combatir las represalias que realiza el personal directriz para disolver el movimiento.
Ayer por segundo día consecutivo personal del nosocomio se manifestó en exigencia al pago del estímulo COVID-19 y condiciones de protección sanitaria.
La gestión del secretario general de la Sección 45 del Sindicato Nacional de Trabajadores del Sector Salud (SNTSA), Barbaciano Sansores Matos, no satisalfació a los inconformes.
La exigencia es el pago del estímulo anunciado por el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, antes del inicio de la pandemia, para todos los trabajadores del Sector Salud.
El bono oscila entre los cinco y 38 mil pesos, en función del riesgo del personal en la atención del SARS-CoV-2.
La Secretaría Estatal de Salud (Sesa) dio a conocer que el recurso es de procedencia federal y la gestión debe ser realizada por el sindicato.
Al no lograr el pago del «bono COVID-19», los trabajadores le desconocieron y acordaron realizar paro parcial de labores.
Porque en casi nueve meses el líder sindical se haya desentendido y ahora pretenda disolver la inconformidad.
La suspensión de labores se mantendrá hasta que la Sesa y la Sección Sindical obtenga la liberación de los recursos.
En caso contrario, la protesta será más extrema.
Los servicios de salud continúan.
Personal de suplencia y apoyo les realiza.