Ciudad de México.- Atrás quedó la imagen de un Roberto Borge soberbio, prepotente, pasado de peso y sabedor de que tiene el poder en Quintana Roo.
Hoy, su imagen fue exhibida como si fuera una presa de caza de las autoridades federales priistas, casualmente, en tiempos electorales.
Solo, sin el séquito de gente adulándolo, sin su flamante novia, la ex diputada federal Gabriela Medrano, y demacrado, se le ve al otrora poderoso Roberto Borge Angulo.
Unas fotos del exgobernador de Quintana Roo, Roberto Borge Angulo, tomadas desde el interior del Centro Federal de Readaptación Psicosocial (Ceferepsi), en Cuautla, Morelos, fueron reveladas por el periódico El Universal.
En las imágenes se muestra al exfuncionario detrás de las rejas de lo que se dice es su actual celda en el penal de Morelos.
Borge luce delgado vistiendo una camiseta azul, y detrás de él un catre revuelto en una pequeña celda con escaso mobiliario y algunos enseres de aseo.
Roberto Borge, detenido en Panamá el 4 de junio, fue extraditado a México el pasado jueves para que enfrente la justicia por el delito federal de operaciones con recursos de procedencia ilícita, y del fuero común: peculado, aprovechamiento ilícito y ejercicio indebido de funciones.
DE LOS LUJOS A LA CÁRCEL
Por su parte, el periodista Carlos Loret de Mola, hace una comparación entre aquel Roberto Borge que se daba la gran vida en Miami, Florida, y el ahora exgobernador de Quintana Roo en la cárcel, donde se percibe en dos fotografías que más autoridades federales filtraron, una celda descuidada y un Borge Angulo delgado y demacrado.
En su análisis, Loret de Mola escribe: Son dos Borges. El de Miami y el de Cuautla.
El que no se escondía y el que está recluido. El que ostentaba los lujos que le regaló su sexenio de poder absoluto y el que tiene que enfrentar el destino de las acusaciones de multimillonaria corrupción en su contra.
El que cargaba a sus tarjetas de crédito los mejores restaurantes y antros de Miami, y el que tiene que adecuarse a vivir en una celda.
Hoy en estas Historias de Reportero presento dos fotografías de un mismo personaje. Son imágenes inéditas.
En la primera, Roberto Borge aparece luciendo un reloj de máximo lujo. Un Richard Mille de carbón y oro rosado, edición especial Lotus. En internet lo cotizan en 250 mil dólares. Casi 5 millones de pesos en la muñeca. Borge está en Miami.
Acaba de dejar la gubernatura. Perdió la elección frente a la alianza PAN-PRD que llevó al ex priista Carlos Joaquín González.
Quizá está arrepentido de no haberlo hecho su candidato y haberse empecinado en Mauricio Góngora. Lo persiguen las denuncias de corrupción.
En México se sabe de sus lujos, de sus viajes, de las invasiones de terrenos y propiedades para quedarse con ellas, de su aerolínea, de su naviera… pero él está tan campante.
Y despacha sin pudor en Florida, hasta donde lo siguieron autoridades mexicanas en coordinación con el gobierno de Estados Unidos, y le tomaron estas fotografías.
Lo traían vigilado, sin que se diera cuenta, en espera de armarle el expediente y poder procesarlo.
Se sabe que Borge dejó Miami y se refugió en Panamá, donde se daba también una vida de grandes lujos en la Torre Trump. Y ahí fue detenido.
La segunda imagen retrata una realidad muy distante. Es la primera fotografía que se revela de Borge tras las rejas en México, después de un largo proceso de extradición que demoró más de medio año y que concluyó finalmente la semana pasada.
La fotografía muestra al ex mandatario priista dentro de la celda en la que duerme desde el viernes, en el penal Centro Federal de Readaptación Psicosocial (Ceferepsi) en Cuautla, Morelos, que es a donde suelen mandar a los políticos en desgracia.
El catre está desordenado, él lleva una playera azul, se le ve flaco y demacrado tras los barrotes.
Algunos enseres de aseo personal se alcanzan a apreciar en el fondo.
Desde esta atmósfera enfrenta las acusaciones de lavado de dinero a nivel federal, y de peculado, aprovechamiento ilícito del poder y desempeño irregular de la función pública a nivel estatal.
Con información de El Universal y El Horizonte.