Intensa jornada sangrienta este domingo en Cancún, donde se registraron el hallazgo de tres cuerpos en diferentes regiones (90, 226 y 232), entre ellos uno arrojado en el interior de una bolsa; un intento de ejecución en la Región 235 y la balacera contra el bar Capri, en la SM 64.
La aparente “tregua” acabó
Después de varios días en relativa calma en Cancún, este fin de semana el sonido de armas de fuego activó en varias ocasiones el Código Rojo, iniciando el sábado por la tarde con la ejecución de un agente de Tránsito, y continuando el domingo en la madrugada, cuando pasadas las 2 de la mañana se halló en la Supermanzana 90, frente al Estadio 86, el cuerpo de un sujeto masacrado a golpes.
En este caso, se informó que la Policía recibió el reporte al 911, corroborando que en la banqueta de la SM 90 en la avenida Tulum, a media calle de la Talleres, estaba un sujeto al que se identificó con el mote de “Chester”, quien trabajaba como contador de un bar.
Según el parte policiaco, a “Chester” lo mataron los golpes que le dieron y una aparente lesión con un cuchillo, sospechando, según testigos, de un joven y a una mujer, quien habría perdido sus zapatillas en la trifulca, pero que no han sidodetenidos. Una de las líneas de investigación es la venganza pasional.
Hasta la borrachera se les bajó
A las 3:15 de la mañana, los clientes que invertían su quincena con las alegres meseras del bar Cabri, a una cuadra de “El Crucero”, entra la avenida Tulum, y las calles 3 y 10, en la manzana 3 Lote 21, en la Supermanzana 64, dejaron su cerveza bien fría debido a los balazos que recibió la fachada.
Según los propios parroquianos del Cabri, cuando dos alegres compadres por fin se retiraban a sus moradas, uno grupo de sicarios rafagueó la fachada del conocido antro que lleva par de décadas al servicio de la comunidad.
Ante la oleada de balazos, el portero identificado como J.N.H., de 32 años, cerró con tres candados la puerta y solicitó la presencia de los policías, mientras las meseras apresuraban a los clientes para que liquidaran su cuenta y se retiraran por la puerta trasera, no sin antes dejar su propina.
Ya asegurada la zona, a unos pasos de la calle de las sirenas (lugar de estéticas atendidas por travestis), los agentes de la Fiscalía General del Estado corroboraron que en el lugar había siete casquillos percutidos, por los que se aseguró el Cabri hasta que las investigaciones concluyan, ya que se indaga si fueron víctimas de alguna extorsión o se negaron a pagar el “derecho de piso”, que los grupos criminales realizan entre empresarios del ámbito chelero.
Reportan otro muerto
Pasadita de las 9:00 de la mañana, se dio a viso a las autoridades policiacas que en la Región 226, a la altura de la manzana 35, a unas cuadras de la avenida Centenario, había un cuerpo.
Hasta el lugar llegaron paramédicos, policías municipales, estatales y los ministeriales, sólo para ratificar que estaba en un terreno el cadáver de un hombre, quien habría habría muerto hace varios días, ya que presentaba indicios de descomposición, pudiendo tratarse de un indigente.
Aunque peritos de la Fiscalía realizaron el barrido de la zona, mientras los ministeriales interrogaban a vecinos, nadie vio nada extraño durante la madrugada, centrado la investigación en un posible atraco que terminó mal, pero no descartan que haya sido arrojado en aquel paraje solitario.
Muerto dentro de una bolsa
Pero la mañana era joven y los peritos aún seguían con su traje para recabar evidencia, cuando a las 11:35 horas de la mañana, el Código Rojo se activó nuevamente, ya que en la Región 232, sicarios tiraron en la calle el cuerpo de un hombre, envuelto en una sábada amarilla, y dentro de una bolsa grande de lona, con flores verdes.
Trascendió que uno de los residentes de la Región 232, se percató de un bulto grande a media calle, justo en la marcada con el número 70, y al revisar su contenido, vio que un “ojo lo veía”, con el pellejo de gallina, el fisgón dio parte a las autoridades, quienes llegaron antes del mediodía.
En el lugar, se encontró a media calle de la manzana 31, frente al lote 12, una caja de cartón de una bocina marca Steelpro, en su interior, una bolsa de lona grande impresa con pétalos verdes y dentro de ella, el cuerpo de un sujeto envuelto en una sábana amarilla.
Aunque las autoridades guardaron hermetismo como en todo los casos de ejecuciones, se supo que el cuerpo habría sido torturado y asesinado de un tiro; sin embargo, esta versión no pudo ser corroborada ni desmentida por la Fiscalía General del Estado, quienes averiguan si alguno de los habitantes de la Región 232, pudo anbotar las placas de la camioneta gris con los cristales polarizados , de donde arrojaron el cadáver.
Vuelan policías a la R. 517
Y a las 12:15 horas, mientras un grupo de ministeriales y peritos levantaba el cuerpo en la 232, en la Región 235, un hombre fue blanco de un intento de ejecución, y aunque sobrevivió, recibió dos balazos.
Fue en la colonia Cárdenas, cerca de Azul Bonampak, en la Región 235, manzana 8 , lote 10, por la avenida Costa Maya, donde un joven sobrevivió al ataque de dos asesino que lo cazaban, y al verlo caminar por la calle, le dispararon desde una motocicleta en movimiento, con la cual se dieron a la fuga.
Debido al nuevo intento de ejecución, los policías municipales aseguraron la calle de terracería en la colonia hasta que peritos terminaran de buscar pistas que conduzcan a la captura de los asesinos; sin embargo, hasta el momento no hay ni un sospechoso presentado ante el agente del Ministerio Público, quien a pesar de tener una mañana movida, no tiene a nadie tras las rejas; mientras el lesionado permanece bajo custodia en el Hospital General de Cancún.
Hay que señalar, que tan sólo en Cancún, en los seis meses y medio que lleva el 2017, ya se contabilizan 87 ejecuciones, de las cuales, seis se dieron en julio, incluyendo dos oficiales de la Secretaría municipal de Seguridad Pública, a cargo del teniendo coronel señaló Darwin Puc Acosta, quien por cierto, afirmó en un programa radiofónico que las ejecuciones son resultado del reacomodo entre grupos criminales que se disputan el control de la venta de drogas en Cancún.