Cancún, Q. Roo.- De las 167 ejecuciones en lo que va del año en este municipio, 15 víctimas de la disputa entre grupos del crimen organizado que buscan el control del narcomenudeo y las extorsiones, permanecen como desconocidos y terminaron en la fosa común del cementerio municipal “Los Olivos”.
Debido a que la Secretaría de Salud estipula que un cuerpo sólo puede permanecer en refrigeración 3 meses, en el primer semestre de este años 15 ejecutados que no fueron reclamados por familiares tuvieron que ser enterrados en una esquina del cementerio, donde nadie los visitó este pasado Día de los Fieles Difuntos.
Además, otros 20 cadáveres están en la lista de ir a para a la misma fosa común, debido a que siguen sin ser identificados y reclamados, y se agota su tiempo en el refrigerador del Servicio Médico Forense (Semefo).
Según las propias autoridades de la Fiscalía General del Estado, el hecho de que un cuerpo no sea reclamado se debe a que en su mayoría las víctimas eran procedentes de otros estado y al no tener registro de ellos en Plataforma México, no pudieron ser identificados ni enviados a sus lugares de origen.
Mientras tanto, en el panteón “Los Olivos” por lo menos los responsables de ese camposanto les colocaron una par de flores y una veladora en la tierra.
