Cancún, Q. Roo.- Un día después del hallazgo de cinco cuerpos en el interior de un auto Mazda en la Supermanzana 43, en la avenida Kabah, la Fiscalía General del Estado confirmó que dos de ellos estaban decapitados y los otros tres con bolsa de plástico en la cabeza, además que presuntamente fueron torturados por las señales de violencia.
El comunicado oficial dice: La Fiscalía General del Estado informó que en relación a las cinco personas encontradas sin vida en el interior de un vehículo Mazda la mañana de este miércoles, no se descarta ninguna línea de investigación, por lo que derivado de las primeras indagatorias realizadas por agentes de la Policía Ministerial y a la inspección de los cuerpos quienes presentan huellas de violencia extrema arroja la participación del crimen organizado.
Luego del reporte de las 6:50 horas de este miércoles, sobre el hallazgo de cuerpos sin vida al interior de un vehículo tipo Mazda color gris modelo 2010, del estado de Quintana Roo, estacionado sobre la Avenida Kabah en la Supermanzana 43, el representante social inició la carpeta de investigación 196/2018, por homicidio en agravio de cinco personas del sexo masculino, de los cuales uno ya está identificado.
Con la intervención de los peritos y agentes investigadores en las instalaciones del Servicio Médico Forense, bajaron los cuerpos de la unidad y se observó que dos cuerpos estaban en el asiento de la parte trasera, quienes se aprecian decapitados y 3 estaban en la cajuela, de los cuales dos presentaban bolsas de plástico en la cabeza por lo que fallecieron por asfixia por sofocación y el otro falleció por estrangulamiento. Dichos cadáveres presentan tatuajes, que pudiera ayudar para lograr la identificación de cada uno.
La Policía Ministerial verificó en el sistema Plataforma México, que el vehículo Mazda color gris, cuenta con denuncia de robo vigente en la ciudad, por lo que es motivo de investigación.
Con relación al occiso identificado, acudió un familiar ante el fiscal del Ministerio Público, quien aseguró que respondía a las iniciales A. A. D. V., de 22 años de edad.
Cabe señalar que esta institución trabaja con sigilo en el avance de la investigación para lograr la identidad de los posibles responsables de este hecho criminal.
Por último, esta dependencia mantiene total secrecía apegada a los lineamientos de la Ley de Víctimas del Estado, por lo que ha ordenado una indagatoria de aquellas personas que sin autorización alguna permitieron la publicación de información y fotografías del lugar de los hechos.