Después de la captura del expresidente de Panamá, Ricardo Martinelli, ayer en Miami, Florida, el exgobernador Roberto Borge podría reunirse de nueva cuenta con su amigo, ya que ambos estarían encerrados en la misma prisión.
Y es que mientras Roberto Borge permanece detenido en Panamá, esperando que el gobierno de México solicite su extradición, Ricardo Martinelli es reclamado por ese país, acusado por corrupción y utilizar fondos públicos para espiar ilegalmente a más de 150 opositores políticos durante su mandato presidencial entre 2009 y 2014.
Así, los dos exfuncionarios podrían compartir sus anécdotas; primero como flamantes gobernantes, después como lustres empresarios, y hoy, como dos simples reclusos en prisión.
Además de los señalamientos por corrupción de ambos, Borge y Martinelli compartirían hasta el mismo abogado, Carlos Carrillo, quien ya formó parte del equipo de litigantes que defendió al expresidente de Panamá.