Cancún, Q. Roo.- Hablar de Cristina Hofman no es fácil, es mucho lo que se tiene o se puede escribir, y al hablar con ella el tiempo es muy corto, así que imagínese una videoconferencia con 30 jugadores de tenis de mesa de Quintana Roo. ¡Una segunda parte, es obligada y garantizada!.
No existe casualidad, esto es obra del destino, ¿cómo podría negarme?” esa fue la respuesta de Cristina Hofman al responder a la solicitud de una charla técnica con los jugadores quintanarroenses, cuenta el entrenador Luis Basurto.
El tenis de mesa de Quintana Roo tiene un vínculo muy estrecho con Cristina: uno de sus primeros entrenadores, Antonio Sánchez Vilchis, quien la llevó a ganar la histórica Medalla de Plata en los Juegos Paralímpicos en Atlanta 1996, fue uno de los fundadores de la Asociación de Quintana Roo. Además Teresa Díaz, que fue su entrenadora es esposa de Luis Basurto, que también la llevó en forma exitosa en la dirección técnica.
Y para cerrar el círculo, en el junio de 2019 se efectuó en Cancún la Primera Copa Internacional Paralímpica que llevó su nombre.
Sean pacientes, trabajen duro, siempre den todo en la mesa y los triunfos van a llegar”, el mensaje es vivencia pura.
Cristina probó varios deportes, finalmente llegó al Tenis de Mesa y después de muchos años llegaron los triunfos y sus dos primeros Juegos Paralímpicos Seúl 1988 y Barcelona 1992.
Fue en 1993 cuando ganó su primer Campeonato Mundial; ganó también en 1995 y luego obtuvo la presea de Plata en Juegos Paralímpicos de Atlanta 1996. Para cerrar el ciclo con dos Paralimpiadas más, Sidney 2000 y Atenas 2004, bajo la dirección de Teresa Díaz.
Como resultado de su disciplina y su ejemplo, 20 años después de ganar la medalla de Plata para México en Juegos Paralímpicos en Atlanta 1996, en noviembre de 2016 recibió el Premio Nacional al Mérito Deportivo, en la modalidad trayectoria deportiva. Antes, en el 2001, la ITTF (International Table Tennis Federation) distinguió a la mexicana Cristina Hofman como la Deportista del Siglo.
Con todos estos antecedentes, 5 juegos Paralímpicos, tres veces monarca mundial (1993, 1995 y 1998), dos títulos Panamericanos, uno de ellos en 2001 en Argentina con Basurto, y además ocho veces primer lugar de las clasificaciones mundiales, la vivencia de Cristina Hofman es indudablemente invaluable y provechosa para los quintanarroenses, de los cuales muchos no sabían la magnitud de todo lo que representa tener los consejos de este “moustro” de atleta.
Con 70 años de edad cumplidos el pasado 10 de mayo, la tenista de mesa en silla de ruedas María Cristina Hoffman tiene fuerzas para seguir promocionando el deporte y deseos de llegar a Cancún para poner en práctica sus consejos y revolucionar con sus vivencias la motivación de estos jóvenes.
El desarrollo del tenis de mesa paralímpico para México continúa: para la edición de Tokio 2021 se cuenta con Víctor Reyes, María Sigala y Claudia Pérez, ya clasificados, a quienes guiará Milton García, que también fue entrenador de la Selección de Quintana Roo y promotor del torneo Paralímpico en Cancún. Es decir, el tenis de mesa quintanarroense tiene el sello de Cristina Hofman.
Siempre agradecida de la vida, hizo resaltar el apoyo familiar para llegar al éxito, en su caso de la mano de su esposo Sergio Luján, su promotor para convertirse en la mejor exponente de su modalidad en el mundo.
Madre de dos hijos, Sergio y Alejandro, ambos profesionistas, Cristina está satisfecha con lo hecho en su carrera deportiva y más en su vida personal.
El tenis de mesa es su tesoro y su pasión, con una misión de vida -promover el tenis de mesa a todos sus niveles, sin distinciones-, la videoconferencia fue muy emotiva.
La disciplina y perseverancia quedaron como el gran mensaje de Cristina Hofman, la mejor jugadora del siglo XX, la leyenda del tenis de mesa mexicano.