Cancún, Q. Roo.- “Ser juzgador no solamente representa un honor, sino que también muchas veces es un riesgo, pero aun así, hacemos esta labor con todo el cariño, con todo el esfuerzo y el compromiso con nuestra Institución”, destacó este día el magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE), José Antonio León Ruiz, al conmemorarse el Día del Juzgador Mexicano.
En este marco, ante los magistrados del Pleno del TSJE, de los miembros del Consejo de la Judicatura y del Colegio de Jueces, León Ruiz, encabezó la entrega de reconocimientos a los jueces con mayor antigüedad, así como a los Jueces que ya concluyeron su función en el Poder Judicial de Quintana Roo.
En presencia de la Consejera Jurídica del Poder Ejecutivo -representante del gobernador Carlos Manuel Joaquín González- Roxana Lili Campos Miranda, y del encargado de la Vice Fiscalía General de Justicia del Estado, Juan Carlos Aldana Salazar, también ofreció una felicitación anticipada a todas las mujeres por la próxima conmemoración del Día de la Mujer, al tiempo que recordó los antecedentes que dieron margen al Día del Juzgador.
En este contexto el Colegio de Jueces entregó reconocimientos a María de Guadalupe Cámara González, Beatriz Eugenia Aban Villalobos, Abraham Alberto Loeza Ortiz y Víctor Manuel Echeverría Tun, así como quienes concluyeron su función como Dulce María Balam Tuz, Isidoro Castro Arrieta, Sandra Luz Morales Gutiérrez, Genoveva del Rosario Hernández Cantarell y María Teresa Castro Ríos.
En su intervención, el presidente del Colegio de Jueces y Coordinador de Jueces Orales Penales del Estado, Pedro Pablo Álvarez Vega, hizo notar la oportunidad del Día del Juzgador Mexicano para no solamente dar el reconocimiento a la trayectoria, sino porque se puede definir al Juzgador, como un profesional del Derecho, como un Depositario, como un Guardián de las leyes, como un control del Estado de Derecho, o simplemente como un ser humano extraordinario, con los más altos valores para el desempeño de su función.
Por años ha sido una constante la búsqueda del reconocimiento a la labor del Juez, al esfuerzo, al sacrificio, a las horas arduas de labor dedicadas a la Institución, sacrificando incluso el tiempo con la familia, pero lo hacemos no solo con amor, sino con un alto. Sin embargo es necesario hacer un alto en el camino para precisamente darnos un reconocimiento a esa trayectoria”, puntualizó.