Cancún, Q. Roo.- Aun cuando el Presidente Municipal de Benito Juárez, Remberto Estrada Barba ordenara la suspensión definitiva del proyecto Gran Solaris Cancún, argumentando que es el resultado de una acción derivada de las múltiples quejas ciudadanas, «maquillando» con esto la serie de irregularidades y complicidad con autoridades federales e inversionista del complejo hotelero, de nada sirve ya que el año ya esta hecho.
Y es que justamente con miras al proceso electoral 2018, es que el Gobierno de Estrada Barba pretende reinvindicarse se está grave falta al otorgarle a través de la dirección de Desarrollo Urbano los permisos de uso de suelo, aun cuando el proyecto no contaba con la Manifestación de Impacto Ambiental por parte de la Semarnat.
Esta irresponsable acción permitió que el complejo hotelero iniciara su construcción provocando con ello la muerte de más de mil quelonios, cuyos nidos se encontraban en uno de los corrales ubicados dentro del predio, acto que se llevó a cabo bajo la complacencia de la Dirección General de Ecología de Benito Juárez.
A este respecto,la representante de la Asociación Civil «Movimiento en Pro de los Derechos del Pueblo», Katerine Ender Córdoba, aseguró que está determinación recién tomada por la autoridad municipal no lo exime de responsabilidad legal como consecuencia de las denuncias interpuestas ante la PGR bajo la carpeta de investigación FED/QR/CUN/0001224/2017.