Chetumal, Q. Roo.- La Fiscalía General del Estado a través de un comunicado dio a conocer que busca a la mamá del exgobernador Roberto Borge, hoy preso, Rosa Yolanda Angulo Castilla, y a la ex titular del Instituto del Patrimonio Inmobiliario de la Administración Pública de Quintana Roo (IPAE), Claudia Romanillos Villanueva, por la venta de terrenos a menor precio del valuado.
Comunicado
La Fiscalía General del Estado, a través de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC), informa que, los amparos de las quejosas Rosa “N” (mamá de Roberto Borge), amparo 300/2018, y Clauda “N” (extitular del IPAE), amparo 302/2018, han quedado sin efecto, por lo tanto pueden ser aprehendidos por la policía ministerial, por lo que dicha fiscalía especializada solicitó la cooperación de la ciudadanía para que le informe si ha visto o tiene información de los dos imputados, ya que se encuentran en calidad de ser detenidos para rendir cuentas a la justicia quintanarroense.
Antecedentes
El 3 de diciembre del 2013, el Instituto del Patrimonio Estatal de Quintana Roo le vendió otro terreno de la reserva territorial a María Rosa Yolanda Ángulo Castilla, madre del gobernador.
Se trata de un terreno de 111 mil 763 metros cuadrados que se ubica en el kilometro 18 +244, de la carretera costera sur, a un costado del hotel Iberostar.
La madre de Borge pagó 15 millones 367 mil 523 pesos por los terrenos en el plazo de un año.
El metro cuadrado de terreno le salió en 137 pesos con playa frente al Parque Marino Nacional Arrecifes cuando el metro cuadrado de terreno en esa zona se cotiza en dos mil pesos.
En noviembre del 2014 le entregaron formalmente las tierras
“Fue un verdadero saqueo, un verdadero quebranto al patrimonio del estado, directo a Quintana Roo y a la sociedad quintanarroense”, afirmó Fabiola Cortés de la Asociación Somos tus Ojos Transparencia por Quintana Roo.
Este terreno que el IPAE le entregó a la madre de Borge, colinda con el predio de la familia Borge llamado punta francesa, que se ubica en el kilometro 18 de la carretera costera sur.
Un año antes de que Borge le entregara a su madre el predio, su padre empezó a realizar trabajos en el lugar.
Organizaciones ambientalistas lo acusaron ante Profepa de rellenar con arena los arrecifes para hacer una playa artificial.
En abril de 2015, la madre de Borge le cedió esas 11.7 hectáreas de reserva territorial a Cesar Celso González Hermosillo.