Luego del revuelo que causó la noticia de la extradición de Salvador Cienfuegos a México, usuarios en redes sociales comenzaron a cuestionar si esta decisión se debe a la cercanía de Donald Trump con Andrés Manuel López Obrador por lo que sería un favor acordado por ambas administraciones.
El punto de donde los usuarios llaman a cuestionar se debe precisamente a la negativa de felicitar a Joe Biden por el triunfo.
La tarde del martes en un comunicado, el fiscal general de Estados Unidos, William Barr, y su homólogo mexicano, Alejandro Gertz Manero, apelaron a «la sólida alianza» entre México y Estados Unidos en cuestión de orden público para la toma de esta decisión.
Además, el Departamento de Justicia de Estados Unidos ha compartido con la Fiscalía de México «pruebas en este caso y el compromiso de continuar la cooperación, dentro de este marco, para apoyar la investigación de las autoridades mexicanas».
Según apunta el comunicado, México abrió su propia investigación contra Cienfuegos tras su detención en Estados Unidos.
De esta manera, el encargado del Ejército durante la administración de Enrique Peña Nieto será trasladado a México, donde no existe una orden de aprehensión en su contra, pero sí una investigación de la Fiscalía General de la República.
Dicha investigación se basa, única y exclusivamente, en la información proporcionada por los fiscales estadounidenses, quienes acusaban a Cienfuegos de aprovechar su posición de poder y recibir sobornos a cambio de impunidad y libertad a grupos del narcotráfico.