Cancún, Q. Roo.- Este miércoles de visita en el Cereso de Cancún, familiares de reclusos acudieron como cada semana, pero no pudieron ver a los reclusos, ya uqe está prohibido el contacto físico y sólo se permiten la video-llamadas, pero les dejan llevarles alimentos y utensilios de limpieza personal.
A las afueras del penal, la larga fila bajo los inclementes rayos del sol desesperaban a los familiares de reclusos, quienes no respetaban la distancia establecida de al menos metro y medio, y nadie del penal trató de darles indicaciones.
Antes de entrar, los visitantes deben entrar por un túnel de “sanitización”, que consta de una brisa de líquido que ayudaría a desinfectar a los visitantes, para ingresar a la zona de control donde exponen la mercancía que revisan las o los celadores, para dejarla ahí y retirarse, en espera de que los productos y alimentos que entregaron, sean entregados sin ser “ordeñado”.