Cancún. – Tras el incremento de casos positivos de Coronavirus Quintana Roo, específicamente en Cancún, ahora son los habitantes de Isla Mujeres quienes insisten que se restrinjan los cruces hacia la Isla.
El caso de una familia en Cancún que sospecha de haber contraído el virus encendió los focos rojos este lunes, ya que uno de ellos trabaja en Isla Mujeres y según la publicación de los medios, sigue cruzando porque sus patrones no la quieren mandar a su casa.
Para quienes viven en Cancún y sospechan de ser portadores de la enfermedad, empiezan a contar las complicaciones que existen para poder acceder a las pruebas y así confirmar si tienen la enfermedad o no.
Por tratarse de una enfermedad nueva, aun existe mucho desconocimiento y si bien todos los días se va aprendiendo más sobre el virus, al menos en Quintana Roo existe la idea de que son más los casos positivos de los que oficialmente se conocen.
Un medio de comunicación digital publicó que un joven de 27 años de edad, empezó a sentir los síntomas desde la semana pasada, pero hasta hoy ignora si él y su familia han contraído la enfermedad.
Explicó que vive en el municipio de Benito Juárez y empezó a sentirse mal desde hace una semana, pero intentó hacerse la prueba del Covid-19, primero en el Hospital General Regional Número 17 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), después en el Hospital General de Cancún “Jesús Kumate Rodríguez” pero en ninguno de los casos tuvo éxito.
El miércoles desperté alrededor de la 1am para darle de comer a mi hija y en ese momento noté síntomas “bastantes simples”, creí que tenía una “gripe cualquiera”. Sin embargo 12 horas después pasó algo extraño, tuve dificultad para respirar, nunca me había pasado, en ese momento las cosas cambiaron” explicó.
Azael N, vive en una pequeña casa con otras cinco personas: su esposa de 27 años, su hija de año y medio, sus cuñadas de 23 y 15 años y su suegra de 52 quien es diabética. De las seis personas, hasta el momento tres presentan síntomas de Covid-19.
Su esposa, quien prefiere permanecer en el anonimato, es quien tiene más fiebre y malestar.
Ella trabaja en Isla Mujeres y a pesar de su actual condición, su trabajo no le ha permitido permanecer en casa. Mientras su hija, quien aún no habla, ha presentado fiebre y dolor de garganta, pero a menor escala, creen que sus padres.
Azael “N” dijo que recorrió varios hospitales a fin de poder hacerse la prueba debido a los síntomas que cada vez eran más claros.
Acudió al Hospital General Regional Número 17 del IMSS o clínica de la 510, cómo la conocen los cancunenses.
Al arribar narra que los mismos trabajadores de la institución de salud lo desanimaron de hacerse la prueba.
Me dijeron que iba a tardar mucho porque no hacen pruebas individuales. Como no tienen muchos trajes (para protegerse del contagio) deben esperar a que se junte un grupo de varias personas y así ahorrar equipo” explicó.
Me informaron que si me hacía la prueba y salía positivo, lo único que pasaría es que me enviarían a casa y me pedirían quedarme ahí 14 días. Sí me desanimé y me regresé a mi casa, reconoce.
El viernes los síntomas empeoraron y ante el miedo el joven padre de familia pidió apoyo a su empleador.
Ambos acordaron llamar a la aseguradora MetLife y ésta envió un médico a su domicilio en Cancún. Tras la revisión, el diagnostico no era favorecedor, “es muy posible que Azael tenga el virus”, afirmó el doctor.
Le recetó Paracetamol, le entregó un listado con los nombres de los laboratorios privados que están autorizados para hacer pruebas y le recomendó a la familia separar los cubiertos y utensilios que han utilizado las personas con síntomas, desinfectar continuamente las superficies y tomar duchas de al menos 20 minutos.
Ese mismo día, antes de llamar a los laboratorios privados, Azael decidió probar suerte y ver si podían hacerle una prueba sin costo, ahora en el Hospital General de Cancún “Jesús Kumate Rodríguez”.
Llegué al hospital a las 2 de la tarde y en la entrada había un guardia con la instrucción de no dejar pasar a nadie.
Esperé por varias horas, pasaron las 4pm, las 5pm, las 6pm y Azael seguía esperando en un rincón del hospital.
Tuve miedo. Estoy dentro de un hospital, no estoy protegido, nadie toma medidas de precaución, nadie te dice que mantengas distancia, nadie se cuida. Tuve miedo” comentó el joven.
Después le informaron que sería el último, y que lo atenderían entre las 9 pm y 10 pm, Azael. Estaba muy cansado, y entonces decidió regresar a su casa.
El sábado alrededor de las 2 de la tarde, Azael cuenta que su dolor de cabeza disminuyó, cree que es gracias al Paracetamol, pero el resto de los síntomas continúan.
Contacté a los laboratorios para solicitar información sobre las pruebas de coronavirus privadas. Es muy triste. La mayoría de los lugares en Cancún no están aplicando el estudio y los pocos que cuentan con él lo ofrecen a costos muy elevados, está arriba de los 10 mil pesos.
Me gustaría que mi esposa y mi hija tomaran la prueba, pero esa cantidad está fuera de mi presupuesto, tengo miedo por mi familia, mi suegra tiene diabetes, sé que es del grupo vulnerable. Si ella o alguien se pone grave no sé qué va a pasar” comentó.
Finalmente dijo que al día de hoy no puede confirmar si tiene la enfermedad o no y ahora solo le queda esperar a que los síntomas vayan desapareciendo.