Isla Mujeres. – Luego de sostener una reunión con náuticos el pasado jueves, hoy ingenieros de la Capitanía de Puerto confirmaron que los protectores de hélices en los motores fuera de borda que buscaban implementar para las embarcaciones que laboran en el avistamiento no son aptos, además del daño que ocasionan en la transmisión de los motores.
Los náuticos quienes están a la espera de sus autorizaciones para iniciar con la actividad del Tiburón Ballena, acudieron hoy a unas pruebas que se realizaron para confirmar la operación de estos equipos en los motores.
Solamente se necesitó de dos pruebas para confirmar que estos equipos no funcionan.
Cerca de las once de la mañana ingenieros de la Capitanía de Puerto iniciaron con las pruebas de los protectores en las hélices de los motores y en uno de los casos, dicho protector se rompió, y en el otro, generó dificultad para la maniobra de la rueda de mando.
Fue durante la prueba realizada en la embarcación “San Diego”, en la cual el protector de las hélices se rompió en dos pedazos, cuando apenas habían recorrido menos de cinco millas náuticas, a una velocidad de 20 nudos, lo que provocó que la embarcación quedara a la deriva y requiriera del apoyo de otra embarcación para poder retornar al muelle de la autoridad marítima.
En la embarcación “Santa Rosa”, se constató que con el uso del protector de la hélice, la rueda de mando se pone rígida, lo que genera dificultad en la maniobra.
Con estos resultados, los ingenieros determinaron que el uso de estos artefactos no es viable, ya que además estos generan daños severos en los costosos motores de 150, 200 y hasta 250 caballos de fuerza.
Los náuticos esperan que con esta determinación oficial de los ingenieros de la Capitanía Puerto, ya se pueda hacer a un lado el uso de los protectores de hélices y de una vez por todas puedan recibir sus respectivos permisos e iniciar con la actividad del avistamiento y nado con el tiburón ballena de esta temporada, que inició el pasado 15 de mayo, de la cual llevan dos días sin poder laborar, precisamente por este caso.