Cancún, Q. Roo.- La polémica “Rueda de la Fortuna” que fue instalada hace poco más de un año y dos días antes de su inauguración desmantelada, debido a que no contaba con los permisos emitidos por la Secretaría de Ecología y Desarrollo Urbano del Municipio, vuelve a dar de que hablar, ahora con su instalación en Plaza La Isla.
Y es que su colocación ya presenta un importante avance, el cual es muy notorio por sus pesadas estructuras.
En el mes de febrero del año pasado, la empresa Holandesa Dutch Weels International comenzó la instalación de esta gran “Rueda”, justamente en el corazón de la Zona Hotelera de Cancún, a espaldas del mercado de artesanías Coral Negro, generando inconformidad de empresarios del lugar, principalmente por los conflictos viales que su ubicación conllevaba.
Incluso, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), se lavó las manos al asegurar que esta atracción antes de ser instalada debió contar con la autorización de la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) que emite la Semarnat, por lo que al momento de hacer la inspección correspondiente, esta ya había sido desmantelada.
Es importante señalar que el Ayuntamiento de Benito Juárez, a pesar de las denuncias de los empresarios, durante los 10 días que duró la instalación se mostró “ciego” y “mudo” ante los señalamientos, y no fue hasta que ya no le quedó más remedio, que a través de la Secretaría de Desarrollo Urbano procediera a la colocación de sellos de suspensión de las estructuras a tan sólo dos días de su apertura.
Cabe mencionar que la llamada “Rueda de la Fortuna”, cuenta con una altura de 60 metros, 42 góndolas cerradas y climatizadas con una capacidad para ocho personas cada una.