Un informe desclasificado de la DEA revela que el capo prófugo se coloca como una de las cabezas de la organización de tráfico de droga junto con Ismael ‘El Mayo’ Zambada
El veterano capo Rafael Caro Quintero, el ‘narco de narcos’ fundador del Cártel de Guadalajara quien pasó 28 años en prisión y fue liberado hace apenas cuatro, tomó el control del Cártel de Pacífico, según la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
El informe publicado hace apenas unos días por las autoridades de Estados Unidos, lo coloca nuevamente como una de las cabezas de la organización de tráfico de droga más poderosas del mundo.
El documento revela que Caro Quintero e Ismael, El Mayo, Zambada, el narcotraficante más buscado por las autoridades mexicanas, mantienen el control de la organización sinaloense, escisión del cártel de Guadalajara.
Líderes del Cártel de Pacífico que operan bajo el ala de Joaquín Guzmán Loera, Ismael Zambada García y Rafael Caro Quintero mantienen jefes de célula en Phoenix, Arizona, para supervisar la distribución de drogas ilegales en la región», detalla el informe.
Dice que las cabezas de la organización —incluyendo a Caro Quintero— coordinan el transporte de drogas ilegales que parten desde Phoenix, Arizona, hacia varias ciudades de Estados Unidos.
En el reporte denominado National Drug Threat Assessment incluso colocan a Caro Quintero nuevamente en el organigrama del Cártel de Pacífico, junto con El Mayo Zambada y los capos encarcelados Joaquín, El Chapo, Guzmán y Dámaso López, El Licenciado.
Caro Quintero pasó 28 años en prisión por el secuestro y asesinato de Enrique Camarena, un agente de la DEA quien investigaba las operaciones del cártel.
En febrero de 1985 Camarena y un piloto llamado Alfredo Zavala fueron torturados y apaleados hasta la muerte. Ese mismo año Caro Quintero fue detenido en Costa Rica.
En agosto del 2013 fue liberado —con una serie de órdenes de aprehensión pendientes luego de su preliberación por un tecnicismo legal— y Caro Quintero dijo a la revisa Proceso que tendría que refugiarse en la sierra del norteño estado de Pacífico, donde creció.
El también fundador del Cártel de Guadalajara contó que desde su excarcelación, se encontraba prófugo con ayuda de gente que vivía en las montañas y de dos pistoleros que lo cuidaban.
Desde entones diversos medios habían manejado información que arrojaba que en cuanto salió de prisión, Caro Quintero regresó a su rol en la organización de tráfico de drogas.
Todo es falso, son mentiras«, contestó Caro Quintero en ese entonces a la revista mexicana. «Yo dejé de ser narcotraficante en 1984 y nunca lo volveré a ser. No quiero nada que ver con el tráfico de drogas».
Aunque la versión de su regreso al negocio de la droga, se confirma hasta el día de hoy, con el informe desclasificado por las autoridades de Estados Unidos.
Fuente: Excelsior