La familia de John Phippen, murió en el tiroteo cuando protegía a una mujer durante el concierto donde Stephen Paddock asesinó a 58 personas e hirió a más de 500
La familia de una de las 58 víctimas de la masacre en Las Vegas, ocurrida el fin de semana pasado, pidió a una corte de Nevada que designe un administrador especial para tomar el control de los activos del atacante, mientras las autoridades investigan las motivaciones del multihomicidio.
La cadena de televisión CNN informó que los abogados de la familia de John Phippen, residente de California que murió cuando Stephen Paddock disparó desde su cuarto de hotel contra la multitud que asistía al festival de música country Route 91 Harvest Festival, presentaron la petición el viernes a la corte del Condado de Clark.
Los abogados solicitaron a un juez que designe al administrador público del condado para que controle el patrimonio de Paddock, para ponerlo a disposición ante cualquier demanda judicial presentada por las víctimas de la masacre.
Paddock, un contador jubilado y aficionado a los juegos de azar, poseía una casa en la comunidad de Mesquite, Nevada, y su hermano declaró que era un inversionista exitoso que poseía departamentos y casas.
Los agentes de ventas dijeron a CNN que Paddock pagó 369 mil dólares en efectivo por su casa de Mesquite en 2014.
Queremos (el patrimonio de Paddock) administrado por la corte, no creo que estemos al final de los activos de Paddock», dijo Richard A. Patterson, un abogado de California que representa al hijo de Phippen, Travis.
«Queremos que alguien vigile los activos para que permanezcan como están», dijo el también abogado Richard Chatwin, quien trabaja con Patterson en la petición.
John Phippen, de 56 años, de Santa Clarita, California, estaba en el festival con su hijo Travis cuando comenzó el tiroteo.
Cuando Travis, médico de profesión, se detuvo para ayudar a una persona, Phippen se quedó con él y protegía a una mujer cuando fue alcanzado por los tiros.
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, tiene previsto viajar a Las Vegas para ofrecer un discurso en el edificio del ayuntamiento, donde se reunirán los participantes de una «caminata semanal de oración por la unidad de la ciudad».
Paddock se quitó la vida, después de matar a 58 personas y herir a unas 500.
Los investigadores intentan descifrar el por qué Paddock cometió la masacre y carecen de información creíble sobre su motivo a pesar de las pistas recibidas.