Isla Mujeres. – La polémica concesión de “Muelle Azul”, restaurante que apareció hace unos meses, es otra de las pruebas de corrupción que heredó Roberto Borge Angulo, así lo asentó Rosa Elena Ríos Fernández, coordinadora general del recinto portuario en Isla Mujeres.
Como respuesta al oficio que giró el ex alcalde y Cronista de Isla Mujeres, Fidel Villanueva Madrid, la hoy encargada de la Apiqroo en Isla Mujeres aseguró que esta concesión al igual que otras más, está en proceso de revocación y son parte de la corrupción que imperaba durante la pasada administración estatal.
Apenas el pasado 4 de Septiembre la propia Alicia Ricalde Magaña aclaró que se continuaba con los procedimientos legales para tratar de rescindir dos de los contratos que liberó el entonces Ercé Barrón Barrera, por instrucciones del Gobernador Roberto Borge Angulo, uno de ellos vigente por 30 años (Muelle de Concreto) y el segundo donde se encuentra el restaurante en cuestión.
Ríos Fernández insistió en que esos dos contratos fueron hechos “a modo”, tan es así que en todos los aspectos se buscó beneficiar a los concesionarios y no a la empresa.
Hoy a través de un medio de comunicación, el cronista de Isla Mujeres solicita al ayuntamiento que se reconsidere la operación de este restaurante.
La coordinadora general de recinto portuario en Isla Mujeres dijo que lamentablemente el concesionario logró anticiparse y antes de que terminara la pasada administración, realizó tramites ante la federación que hoy imposibilitan revocar la concesión.
Nos consta que se intentó echar a bajo esta concesión porque evidentemente estaba hecha a modo, tan es así que el pago por derechos está tazado muy por debajo de las rentas dentro de la terminal” comentó.
Ríos Fernández presentó copias del contrato firmado en la ciudad de Chetumal así como del registro del mismo contrato realizado en la ciudad de México, pero curiosamente ambos están fechados el mismo día, lo cual habla de inconsistencias.
Todo esto habla de la corrupción que imperaba durante la pasada administración, bajo el mando del propio Roberto Borge Angulo” comentó.
Dijo que el concesionario de este restaurante aparece en papeles bajo el nombre de Jesús Rabago Orozco, pero de él no se tiene conocimiento, ya que son sus apoderados legales quienes se encargan de todo.
Ríos Fernández puntualizó que aun pese a todos estos inconvenientes, la Dirección General de Puertos autorizó la entrega de este espacio, mismo que después Ricalde Magaña modificó reduciendo espacio de operación a solo 164 metros cuadrados.
Aun así, existe acceso pues esta es una de las condicionantes para que pudiera funcionar” refirió Ríos Fernández
La coordinadora general del recinto portuario en Isla Mujeres exhortó al Cronista de Isla Mujeres para que investigue sobre los permisos municipales otorgados al concesionario, ya que si estos no hubieran sido liberados, dicho restaurante no estaría operando al día de hoy.