Elon Musk llegó con la espada desenvainada a Twitter, y a una semana de tomar el control de la red social del pajarito azul, ya despidió a cerca de 3 mil 700 empleados en todo el mundo, entre directivos y personal en general.
Y es que tras concretar la compra de Twitter, salieron los principales directivos de la red social: Parag Agrawal, director ejecutivo; Ned Segal, director financiero y Vijaya Gadde, directora de política legal.
Con respecto a la reducción de la fuerza laboral de Twitter, Elon Musk tuiteó este día: “desafortunadamente no hay otra opción cuando la empresa está perdiendo más de $4 millones por día. A todos los que salieron se les ofrecieron 3 meses de indemnización, que es un 50% más de lo requerido legalmente”.
En la sede de Twitter, en San Francisco, California, los empleados de Twitter recibieron el jueves un correo electrónico adelantando que antes de las 16:00 GMT del viernes tendrían una notificación informándoles si seguirán o no en la compañía, según los medios estadounidenses, y así, fueron más de 3 mil los liquidados.
Bien, negocios son negocios y ahora que vayan por las granjas de bots y “tropas” que son mercenarios al servicio de políticos y empresas que pagan por golpear y manchar reputaciones!!!
Buen inicio, lo aplaudo… un negocio tiene que ser negocio primero, para poder dar empleos. https://t.co/CgSF5CIXvi
— Don Ricardo Salinas Pliego (@RicardoBSalinas) November 4, 2022
Regarding Twitter’s reduction in force, unfortunately there is no choice when the company is losing over $4M/day.
Everyone exited was offered 3 months of severance, which is 50% more than legally required.
— Elon Musk (@elonmusk) November 4, 2022
EMPLEADOS PRESENTAN DEMANDA
Los planes de Musk para reducir la cantidad de empleados puede encontrar un obstáculo después de que se presentara una demanda en el tribunal federal de Estados Unidos.
La demanda, presentada por cinco aún empleados de Twitter, busca de órdenes que la compañía cumpla con la Ley federal de Notificación de Ajuste y Reentrenamiento de Trabajadores, que requiere un aviso de 60 días para despidos masivos.