Un equipo de Inteligencia de los Estados Unidos (EU) publicó un informe sobre el supuesto origen del Coronavirus (COVID-19), documento que ha sido fuertemente criticado desde Pekín.
El resumen desclasificado de dicho documento fue pulicado el pasado viernes por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional de EU, luego de que Joe Biden pidiera a las agencias de inteligencia que ‘redoblaran’ sus esfuerzos para determinar cómo comenzó la pandemia.
La órden del mandatario estadounidense fue la de desclasificar la mayor parte posible de documentos sobre el COVID-19. La más reciente publicación fue la del equpo de Inteligencia.
No obstante la comunidad de inteligencia se ‘dividiría’ sobre cuál de las dos teorías sobre el origen del virus tiene más posibilidad de ser la correcta.
Todas las agencias evalúan que dos hipótesis son plausibles: la exposición natural a un animal infectado y el incidente asociado a un laboratorio”, según el resumen publicado.
El informe estadounidense subraya como conclusión que los analistas no podrán ofrecer ‘una explicación más definitiva’ sin nueva información de China, como muestras clínicas y datos epidemiológicos sobre los primeros casos reportados.
Por lo tanto, las agencias concluyeron que ‘el virus no fue desarrollado como arma biológica’.
Por su parte, las agencias de espionaje estadounidenses se inclinaron por la explicación de que el virus se originó en la naturaleza. Pero personas familiarizadas con dichos informes han dicho que en los últimos meses ha habido poca corroboración de que el virus se había propagado ampliamente y de forma natural entre animales salvajes, señala Reuters.
LA CASA BLANCA PIDE TRANSPARENCIA
“Si bien esta revisión ha concluido, nuestros esfuerzos por comprender los orígenes de esta pandemia no descansarán”, dijo Biden en una declaración tras la publicación del resumen. “Haremos todo lo posible para rastrear las raíces de este brote que ha causado tanto dolor y muerte en todo el mundo, para que podamos tomar todas las precauciones necesarias para evitar que se repita”, agregó.
Biden criticó a China por no ser transparente con la investigación y exigió que “comparta plenamente la información”, sin identificar ninguna medida coercitiva para lograr la cooperación.
Statement by President Joe Biden on the Investigation into the Origins of COVID-19 | The White House https://t.co/NDtBI1E54p
— Laura Rosenberger (@rosenbergerlm) August 27, 2021
Existe información crítica sobre los orígenes de esta pandemia en la República Popular China, pero desde el principio, los funcionarios del Gobierno chino han trabajado para impedir que los investigadores internacionales y los miembros de la comunidad mundial de la salud pública tengan acceso a ella”, dijo el mandatario.
RESPUESTA DE PEKÍN
La Embajada de China en Washington respondió con un extenso comunicado en el que afirmaba que Estados Unidos había “fabricado” el informe e invocaba un error de los servicios de inteligencia estadounidenses sobre las armas de destrucción masiva antes de la Guerra de Irak.
El comunicado empieza resaltando que el rastreo del origen es una “cuestión de ciencia” y “solo debe y puede dejarse en manos de científicos, no de expertos en inteligencia”.
El informe de la comunidad de inteligencia se basa en la presunción de culpabilidad por parte de China, y solo sirve para poner a China de chivo expiatorio”, dijeron desde la Embajada. “Tal práctica solo perturbará y saboteará la cooperación internacional en la búsqueda del origen y en la lucha contra la pandemia, y ha sido ampliamente rechazada por la comunidad internacional”, agregó.
Asimismo, aseguraron que la crítica de Washington hacia Pekín por falta de transparencia es solo una “excusa en su campaña de politización y estigmatización”, reiterando que desde el brote de la COVID-19, China ha “divulgado información, compartido la secuenciación del genoma del virus y llevado a cabo la cooperación internacional para luchar contra la enfermedad”.